Amable protectora mía,
santa Marta gloriosa,
que tuviste la maravillosa fortuna
de conocer a Jesús en sus obras,
hechos, palabras y milagros,
y que en tu casa y amoroso corazón albergaste
con inmenso gozo y complacencia,
te ruego, dame alivio y consuelo en mi tristeza.
Remedia mis penas y aflicciones
consígueme, te suplico con humildad,
que la persona que tanto extraño y ansío
que los llantos, penas y ausencias queden atrás
que regrese rendido a mí la persona que tanto amo,
que solo sea para mi y no piense en nadie mas
y que nuestro amor perdure para siempre.
Dichosa santa Marta,
que solo sea para mi y no piense en nadie mas
y que nuestro amor perdure para siempre.
Dichosa santa Marta,
que con la Santísima Virgen María
viviste la alegría y el dolor,
pide a la Santa Señora
que medie ante su Hijo, mi Señor,
y remedie mis urgentes problemas:
(pedir aquí lo que tanto se desea).
Santa Marta bendita
tú que fuiste fuerte
y con valor dominaste la adversidad,
haz que pueda vivir en amor y paz,
soluciona mi gran necesidad.
Por el amor que tuviste por Jesucristo,
te pido querida santa Marta
que no me dejes en el olvido,
y ruega por mí y mi familia,
para que no nos apartemos de Dios.
Te lo pido por Jesucristo nuestro único Señor,
a quien sea la alabanza y la gloria
y la acción de gracias por todos los tiempos.
Amén. +
Rezar la Salve y el Credo.
Repetir la oración y los rezos
Rezar la Salve y el Credo.
Repetir la oración y los rezos
durante tres días consecutivos.
0 comentarios:
Publicar un comentario