Oh Señor extiende tus manos altísimas y poderosas,
que eres fuerte y sanas nuestros cuerpos y almas,
expulsa cualquier potencia malvada, envidia o maleficio
y haz que en cambio obtengamos paz y abundancia de bienes.
Espíritu del
Señor, Espíritu de Dios,
Padre, Hijo y
Espíritu Santo, Santísima
Trinidad,
Santísima Virgen María, pura e Inmaculada,
Ángeles,
Arcángeles y todos los Santos del paraíso,
descended sobre
mí, venid pronto en mi ayuda,
dadme vuestro amparo, que vuestra protección me auxilie
y aleje para siempre todo enemigo, mal y adversidad,
no rechacéis mi oración, que llegue a mí vuestra misericordia.
Con arrepentimiento por las faltas cometidas y dolor de corazón,
me encomiendo a Ti mi Dios todopoderoso y caritativo,
en Ti deposito mi confianza, mi fe y esperanza;
te ruego perdones mis pecados y me escuches y atiendas.
Fúndeme, Señor, modélame, lléname de ti,
utilízame.
Expulsa de mí todas las fuerzas del mal,
con tu inmenso poder aniquílalas,
destrúyelas,
quítalas de mi persona, de mi vida y hogar
para que yo pueda
estar bien y hacer el bien,
para que pueda tener paz, quietud, prosperidad y bienestar
y no puedan enturbiar mi existencia terrenal ni la de los míos.
Expulsa de mí los maleficios, los hechizos y los conjuros,
Expulsa de mí los maleficios, los hechizos y los conjuros,
que hayan podido mandarme, echarme o enviarme;
líbrame de las brujerías y de las magias de cualquier color,
de todo trabajo en mi contra que pueda dañarme y confundirme;
corta para siempre las ataduras, las maldiciones y el mal de ojo,
las influencias de las misas negras o trabajos de cementerio
que puedan afectar mi vida y la de los que quiero,
líbrame de la infestación
diabólica y la obsesión
diabólica;
sepárame todo lo que es
mal, de todo lo que me perturba,
de pecado, envidia,
traiciones, odios, rencores y celos
rencores, falsos testimonios, perfidia;
todo lo que me pueda causar enfermedad
física,
psíquica, moral,
espiritual, emocional y diabólica.
Por favor, quema todos estos males en el infierno,
Por favor, quema todos estos males en el infierno,
para que nunca más
me toquen a mí, ni a mis allegados
y ni a ninguna otra
criatura en el mundo.
Yo....... en este momento y lugar ordeno y mando,
Yo....... en este momento y lugar ordeno y mando,
que se vayan de mí y mi vida todos los malos espíritus,
con la fuerza de Dios Padre Misericordioso y Omnipotente,
en nombre de
Jesucristo mi glorioso Salvador,
por intermedio de mi Madre, la Virgen Inmaculada
y de todos los Ángeles, Arcángeles, Apóstoles y Santos,
ordeno y mando a todos los
espíritus inmundos,
a todas las presencias
que me molestan e intranquilizan,
que me abandonen
inmediatamente,
que desaparezcan, que se esfumen definitivamente
y que se vayan todos al
infierno eterno,
encadenados por tu bendito guerrero san Miguel arcángel,
por san Gabriel,
por san Rafael, por nuestros
ángeles custodios,
aplastados bajo el
talón de la Virgen
Santísima Inmaculada,
protégenos colocándonos por encima de todo mal y malignidad.
Padre Celestial, en unión con el Espíritu Santo, hoy te pido
que la Preciosa Sangre Redentora de nuestro Señor Jesucristo
nos cubra y quebrante toda atadura que exista sobre nosotros
y la fuerza de su Cruz nos preserve, nos libere y custodie,
desde hoy y para siempre, para que no nos dañe nada ni nadie.
Así sea, así se cumpla lo que pido. +
Reza un Credo, una Salve, un Padrenuestro, un Avemaría y un Gloria.
Haz la oración y los rezos durante tres días seguidos.
Haz la oración y los rezos durante tres días seguidos.
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