San Lázaro, amigo fiel de nuestro Señor,
a ti que eres glorioso Patrón de los Pobres
y poderoso abogado de quien sufre necesidad,
quiero solicitarte seas mi benefactor en los Cielos
y lleves a Dios, Soberano Hacedor de todo lo creado,
que es nuestro Padre de amor y misericordia,
mis humildes y sentidas suplicas,
que tu poder de intercesión ante Él
me ayude a salir cuanto antes
de todos los males y tribulaciones
que en estos momentos me aquejan.